
En la primera conferencia de prensa del año desde Casa de Gobierno, Macri negó que su amigo, el jefe de los espías, Gustavo Arribas, haya recibido dinero espurio por parte de un operador financiero condenado en la causa por el escándalo de coimas de Odebrecht.
Arribas no fue el único en recibir el apoyo del mandatario también fueron beneficiarios de “sus caricias” otros amigos. Aunque parezca increíble reivindicó “el federalismo” que posibilitó que la justicia de Jujuy manejada por su socio Gerardo Morales encarcelara a Milagro Sala, se refirió al primer año de Sala detenida y evaluó que para la Justicia provincial “cree” que Sala “cometió delitos”. De esta forma, reiteró una explicación que dio en el complejo de Chapadmalal que le valió el repudio del secretario general de la OEA, Luis Almagro, ya que la Justicia “no se administra por opiniones”.
También hubo un desagravio para otro de sus amigos, el empresario británico Joe Lewis, a cuya mansión Macri suele ir a descansar y donde se alojó durante la visita de Barack Obama a Bariloche. El norteamericano fue denunciado por impedir el acceso al Lago Escondido, en Río Negro, y por impulsar en El Bolsón un proyecto inmobiliario en una reserva natural: “Le da trabajo a cientos de personas y no entiendo por qué esta búsqueda de agredirlo”.
Además de abogar por Arribas, Morales y Lewis, el mandatario hizo un párrafo en su propia defensa. “Todas las denuncias que me hicieron son mentiras”, enfatizó sobre la investigación que lo vincula a empresas offshore reveladas por los Panamá Papers. Pidió que “la justicia resuelva el camino” de esa causa “porque si no todo se dilata en el tiempo y se termina confundiendo”.
También justificó el proyecto de “un código penal juvenil (sic)” que baje la edad de imputabilidad de 16 a 14 años y citó como ejemplo el caso de Brian Aguinaco y el asesinato de un hombre ayer en Villa Ballester, en los que están sindicados como autores chicos de 15 y 14 años, respectivamente, porque -dijo- “la primera preocupación es cuidar a los argentinos”. Agregó que “el mundo ha avanzado hace rato en la punibilidad de chicos acusados de cometer delitos”. “Lo mismo con el tema de la inmigración”, señaló en alusión a la iniciativa para que se acorte el tiempo de deportación de extranjeros que cometen un delito en el país y fueron juzgados y detenidos por ello.
“Empezamos un año con optimismo”, resaltó y reiteró su intención de presentarse a una reelección “diciendo la verdad, respetando y dialogando”, y aseguró tener en sus manos “informes” que dan cuenta “de que el empleo está creciendo”.
Una vez más, un Macri pleno de mediocridad y cara de poker habló con sus periodistas amigos.
RSS