
Hoy el magnate Donald Trump asumirá como cuadragésimo quinto Presidente de los Estados Unidos, dejando atrás una de las campañas electorales más bizarras de la historia, y una elección numéricamente perdida. Aunque Trump, a pesar de haber recibido casi tres millones de votos menos que su rival, Hillary Clinton, obtuvo en el Colegio Electoral una diferencia abultada que le dio la legitimidad necesaria para llegar a la Casa Blanca. Este detalle opera como la mejor muestra del desrespeto del sistema “democrático” norteamericano por el voto popular.
Trump promete romper en varios aspectos las políticas de estado de su predecesor, Barack Obama, políticas que, en su mayoría, tienen décadas de continuidad. La mayor incógnita está centrada en que hará el nuevo presidente con la “Ley de Protección al Paciente y Cuidado de Salud Asequible”, conocida como Obamacare, que e nuevo presidente prometió destruir (aunque luego dio marcha atrás y dijo que la mantendría a medias), a pesar de que eso significaría dejar sin seguro de salud a 18 millones de norteamericanos.
Trump llega al poder luego de una larga lista de escándalos en su alocada vida en la que nunca faltaron las mujeres hermosas. Se dice Presbiteriano (aunque esa iglesia emitió un comunicado hace algunos meses diciendo que el presidente electo no es un miembro activo), y republicano, aunque también fue afiliado demócrata en un pasado no muy lejano. Durante la campaña medios estadounidenses desempolvaron una publicación de la revista People de 1998 en la que el magnate afirmaba: “Si yo fuera a aspirar a la presidencia de Estados Unidos lo haría por el Partido Republicano. Ellos son el grupo más tonto de votantes de todo el país. Ellos creen en cualquier cosa que les diga la cadena de televisión Fox News y yo les puedo mentir a mi antojo y se creerán todo lo que yo les diga. Apuesto a que mis números serian terribles”.
El presidente en números
Donald Trump nació el 14 de junio de 1946, tiene 70 años, 3 matrimonios, 5 hijos y 8 nietos. Forbes calcula su fortuna asciende a 4.500 millones de dólares y aunque Bloomberg LP asegura que la misma no sobrepasa de 2.900 millones el propio magnate, ofendido por las cifras dadas a conocer, desmintió a la publicación y a la firma financiera diciendo que sus millones son más de 10.000. La nave insignia de su corporación es la Trump Tower, que mide 202 metros y en el momento de su inauguración (1982) era el edificio más alto de Estados Unidos, tiene 58 pisos y está valuado en 620 millones de dólares según Forbes. Aunque dijo que la celebración sería la más austera de la historia se estima que hoy gastará unos 200 millones de dólares para la ceremonia de asunción de mando, aunque no los pagará él, claro, el estado de la Unión se hará cargo de las cuentas. El muro que pretende construir en la frontera con Mexico mediría 12 metros de alto y 3.200 km de largo, y costaría alrededor de 8.000 millones de dólares que, según repite todo el tiempo, le hará pagar al país vecino. Su número de la suerte es el 13 y en las elecciones presidenciales logró casi 63 millones de votos, 3 millones menos que su oponente, aunque en el Colegio Electoral logró 316 miembros, contra los 232 que logró Hillary.
Protestas
Las protestas contra Trump marcarán el humor del día y se prolongarán durante el fin de semana. El gobierno informó que se emitieron permisos para más de veinte manifestaciones, que van desde unas pocas docenas de personas hasta cientos de miles. La más masiva será la “Marcha de Mujeres” que tendrá lugar mañana. Se espera que casi un cuarto de millón de asistentes viajen desde todo el país para participar de la manifestación contra un presidente recién electo más numerosa de la historia. La convocatoria feminista busca, según sus organizadoras, “dar un mensaje fuerte a la nueva administración en su primer día, y a todo el mundo, de que los derechos de las mujeres son derechos humanos”, y tendrá, además del acto central en Washington, réplicas en otras ciudades de Estados Unidos y de otros países.
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