El presidente Mauricio Macri pasó esta mañana por el municipio bonaerense de Morón para reunirse con beneficiarios del plan habitacional Procrear. Algo que no le resultó muy cómodo, pues se encontró con que esos beneficiarios le agradecían al gobierno de “La pesada herencia” por los créditos blandos adquiridos para sus viviendas.
Pero lo que más llamó la atención fue el descomunal operativo de seguridad que se organizó en torno a la visita presidencial al territorio del ex marido de la gobernadora Vidal, Ramiro Tagliaferro. Mientras Macri recorría las unidades del complejo de departamentos construido en el barrio Seré, ubicado en la localidad de Castelar, en las inmediaciones del lugar había un increíble despliegue de las fuerzas de seguridad.
Pablo Lapuente, productor de Qm Noticias, denunció que los medios de comunicación no tuvieron acceso a la zona debido al restrictivo cerco que montaron los agentes de seguridad.
El mega operat
ivo de seguridad contó hasta con franco tiradores apostados en las terrazas de los edificios. Los cuidados se deben a los constantes escraches que sufre Macri cuando realiza actos públicos. El último fue en cuando recorría las zonas afectadas por las inundaciones en la provincia de Tucumán cuando un grupo de manifestantes comenzó a insultarlo y a gritarle “oligarca hijo de puta”.
Por su parte, el portal zonal “En Orsai”, de Javier “El Profe” Romero contó que, además del descomunal operativo de seguridad llamó la atención el recibimiento que le dieron los vecinos al presidente en el barrio Procrear, con banderas y carteles agradeciéndole a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner por haberles dado la posibilidad de acceder “al sueño” la casa propia.
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