Vecinos bonaerenses de Rincón de Milberg, en el partido de Tigre recibieron a la vicepresidenta Gabriela Michetti y al ministro del Interior Rogelio Frigerio, con carteles agradeciendo a Cristina Kirchner, por las casas construidas por el Plan Progresar.
Tras un año y medio de demora el Gobierno realizó ayer un acto para la entrega de apenas 50 de un total 442 viviendas. Sin embargo, más de cien adjudicatarios organizados denuncian que sus hogares fueron sorteados por la gestión de Cristina Kirchner y que incluso debieron realizar denuncias ante la Justicia para frenar el intento del Ejecutivo de incrementar la tasa de interés previamente acordada.
Durante el acto oficial, Michetti pidió disculpas por la demora en la entrega de más de un año y medio debido a dificultades y conflictos en la negociación de los acuerdos.
Los adjudicatarios, representados por Matias Fortunatti, denunciaron que llegar a este momento “fue una lucha muy dura que debieron dar los vecinos, ya que la nueva administración nacional decidió incumplir las condiciones originales del programa y olvidó el espíritu del mismo, por lo que quisieron aumentar el valor de la cuota pactada originalmente, además de las demoras en las entregas”.
Los vecinos también están reclamando por cocheras y ascensores que figuraban en el plan original. Fortuatti sostiene
que “los ascensores nunca se hicieron y las cocheras se quieren vender”, y subrayó, “el tema de los ascensores no es menor por cuanto no contempla la posibilidad que un vecino se incapacite en el futuro, si esto ocurre se debería mudar, por que a los edificios sólo se accede por escalera, ya que en la planta baja no hay viviendas, sólo locales y aunque de las 442 viviendas del barrio 12 son funcionales para discapacitados, el tema es si alguien se incapacita a posteriori”, agregó Fortunatti.
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