Por Gabriel Link –
Con un paraguas mediático mucho más amplio aun que el que tiene el gobierno nacional, el flamante gobernador, Gustavo Valdés salió cómo un desaforado a buscar endeudamiento para paliar la crisis financiera en la que Colombi dejó a la provincia. Antes de irse el mercedeño había tomado 2300 millones, de los cuales 500 fueron sin autorización de la Legislatura Provincial.
Con un presupuesto de 47.200 millones para el año 2018 el gobernador busca nueva deuda por 5.500 millones, lo que representa casi el 12% del presupuesto anual.
Esos 5.500 millones prácticamente duplicarán los pasivos que hoy tiene la provincia, que ascienden a 6.900 millones, llevándola a casi 13.000 para el próximo ejercicio, y colocando la relación deuda/recursos en su punto más alto de los últimos 4 años, 31,1%.
Este desbalance se debe al Pacto Fiscal, que Colombi le firmó a Mauricio Macri para que Corrientes se haga cargo de “su parte” de los 40.000 millones que el presidente decidió darle a la Provincia de Buenos Aires. Una vez más, la provincia más pobre del país debe financiar a la más rica.
Por su parte, el nuevo intendente de Corrientes, el también radical, Eduardo Tassano, con el mismo apuro que el gobernador Valdés, salió a buscar los recursos que el ex mandatario Ricardo Colombi le cercenó al intendente saliente Fabian Ríos en el último año. Tassano puso a consideración del Concejo Deliberante un aumento de las tasas municipales del 30% y del boleto de colectivo de casi el 60%.
Solamente en 2017 Colombi les “robó” a los capitalinos OCHENTA MILLONES DE PESOS, eso generó un agujero negro que el peronista se negó a salir a cobrarles a los vecinos. Hoy Tassano puso en movimiento la maquinaria para que los correntinos se hagan cargo de esos fondos aumentándoles de manera criminal las tasas y el transporte. Con Ríos, viajar en colectivo costaba 7,70, con Tassano costará 12,10.
Además, una de las primeras medidas del nuevo intendente fue ordenar la intervención de La Caja Municipal de Prestamos. La entidad financiera de la Municipalidad de Corrientes cobra las tasas y los impuestos municipales y paga los salarios de los 7.000 trabajadores municipales. Durante la gestión de Fabián Ríos, la Caja Municipal de Préstamos pasó a ser también la entidad que administra las 2.400 hectáreas de Santa Catalina y su urbanización.
Finalizada la gestión de Ríos, a La Caja le quedaron activos por más de 580 millones de pesos por cobrar en el corto plazo. Tiene un directorio conformado por dos representantes del Ejecutivo Municipal y un representante de los trabajadores designado a través de elecciones libres. En su primer día de gobierno Tassano ordenó su intervención, anulando la representación de los trabajadores, con lo cual la entidad volverá a carecer del control de otros organismos ni tendrá control obrero. En la era radical La Caja pasará a ser una lata en la que el intendente pueda meter la mano cada vez que se le ocurra.
Gracias al cerco mediático que protege al radicalismo Tassano logró quedarse con el municipio, Los medios de la nómina operaron para que la mayor parte de los capitalinos no se enterara nunca de los 80 millones que Colombi les quitó para desfinanciar al gobierno peronista, así como tampoco se enteraron de las cusas que acucian al ex gobernador Ricardo Colombi. Que no son pocas ni simples.
RSS