De la Redacción de Contrapoder –
Mientras en la calle más de un millón de personas reclamban por el fin del aborto clandestino y la ampliación de sus derechos, el jurásico Senado nacional rechazó el proyecto de legalización de la interrupción voluntaria del embarazo que traía media sanción de Diputados. Lo cierto es que, gracias al conservadurismo reinante en nuestra política el aborto en Argentina continuará siendo clandestino, ilegal y oneroso.
En las afueras del Congreso, el sector que reclamaba que se mantuviera la penalización del aborto, senciblemente menor que la “marea verde”, celebró con fuegos artificiales, mientras que los militantes de los derechos de la mujer eran reprimidos porque un pequeño grupo decidió encender una fogata para calentarse ante el intenso frío.
El no reunió 38 votos y el sí 31. Una senadora se ausentó con licencia por embarazo y dos ya habían anunciado su abstención. El salteño Rodolfo Urtubey debió aclarar sus dichos sobre los abortos realizados en caso violación luego de que la mendocina Anabel Fernández Sagasti calificara sus afirmaciones como “una bestialidad de la época de las cavernas”. Durante la sesión, hubo discursos vehementes como el de la tucumana Beatriz Mirkin o más emotivos como el de Gladys González, que llegó hasta las lágrimas. También hubo comparaciones exóticas como la de Esteban Bullrich, quien, en línea con los perritos de la diputada Estela Regidor y las marsopas del diputado Martín Grande, habló de la afinidad genética con los “chimpancés”.
Confiada en que tenían el número para ganar, la vicepresidenta Gabriela Michetti intentó acelerar el horario de la votación con la excusa de que era una recomendación del Ministerio de Seguridad para evitar eventuales incidentes afuera. La senadora kirchnerista Marilin Sacnún le pidió explicaciones y tuvo que aclarar que la seguridad está garantizada “todos los días, hasta el día que sea”. También Michetti, realizó un papelón “a micrófono abierto” cuando llamó “pelotudo” al presidente del interbloque Cambiemos, Luis Naidenoff, quien le pedía ser flexible con los tiempos de las exposiciones.
RSS