De la Redacción de Contrapoder –
No son pocos los operadores judiciales que opinan que el fiscal Carlos Stornelli tiene las horas contadas en Comodoro Py. Además de los casos de Pedro Etchebest, José Manuel Ubeira y Gonzalo Brusa Dovat, el fiscal deberá responder por tres nuevas causas, el intento de cámara oculta contra uno de los abogados de Mauricio Macri, Javier Landaburu, la extorsión a Pablo Barreiro y tareas de espionaje ilegal relacionadas con Jorge Christian Castanon. El primero de los nuevos sucesos involucra a los abogados del empresario Eduardo Eurnekián, procesado en el caso de las fotocopias de los cuadernos. El último, al “peruano” que fue mencionado en los chats que el fiscal con asiento en Comodoro Py cruzó con el falso abogado.
En una resolución que se conoció este miércolespero que fue rubricada el 1° de marzo, el juez federal de Dolores informó a la defensa de Stornelli “de los nuevos hechos que se le atribuyen y que han sido motivo de tratamiento y acusación por parte del representante ante esta sede del Ministerio Público Fiscal (maniobra contra el Dr. Javier Landaburu, caso de Pablo Barreiro y las tareas de espionaje ilegal relacionadas con Jorge Christian Castanon)”, escribió.
Javier landaburu es parte del “Estudio Landaburu, Feder, Carrió, Mayer & Rosental” un bufete fundado en 1942 y que representa al presidente y sus empresas desde hace años. Lo llamativo del caso es que desde hace décadas el estudio está alojado en el estratégico barrio de Retiro. Cerca de algunos de sus “representados” pero también a pasos de Comodoro Py, donde tiene relaciones afinadísimas con la corporación judicial.
Por esta razón cuesta entender que Stornelli, un autentico esbirro de Macri, y protagonista de la mafia que opera en Comodoro Py, mandara a espiar a su abogado, salvo, opinan algunos, que fuera el mismo presidente quien se lo hubiera ordenado, solamente en ese caso la intromisión cobraría sentido. Que Macri quisiera “escuchar” a su abogado.
La citación de este jueves se debe a que el juez recabó “elementos de prueba suficientes acerca de la participación del fiscal Carlos Stornelli en las maniobras vinculadas con las operaciones de inteligencia y espionaje ilegales llevadas a cabo por Marcelo Sebastián D´Alessio”.
En la fundamentación de aquella citación, se le imputó responsabilidad en los casos del empresarios agropecuario Pedro Etchebest, el abogado José Manuel Ubeira y el exfuncionario de PDVSA Gonzalo Brusa Dovat. Ahora el fiscal requirió se sumen los tres casos mencionados. Solo resta saber si el cuestionado Sornelli se presentará a declarar.
Aunque, se presente o no, ya no son pocos los que opinan que el poder real entregó la cabeza de Stornelli para “salvar” la causa de las fotocopias de los presuntos cuadernos de Centeno, muletilla de campaña de Cambiemos que quedó en la mira por la cantidad de acusaciones que está recibiendo el fiscal que trabaja en su instrucción. Tal vez “lo más barato” sea llevarse puesto a Stornelli, previa negociación y promesa de posterior salvataje judicial. Que el mismo fiscal que pidió que Ramos Padilla entregue la causa a Comodoro Py ahora sea quien lo imputa, podría leerse como una señal en ese sentido.
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