Ante la continuidad del paro docente que impide el inicio de las clases en territorio bonaerense, la gobernadora María Eugenia Vidal volvió a fustigar a “algunos dirigentes gremiales” que, según dijo, “solo quieren el conflicto”. Esta vez “Heidi” prometió un premio a los “carneros” y un aumento por decreto.
En ese sentido, Vidal anunció dos medidas para tratar que quebrar la ofensiva gremial: un “adelanto de paritarias” de entre 1.500 y 3.750 pesos y un “reconocimiento extraordinario y por única vez” de 1.000 pesos a los docentes que no hayan adherido a los paros.
“Hace falta que coincidamos en cuatros valores básicos: los chicos tienen que estar en el aula, las leyes y los fallos judiciales tienen que ser cumplidos, y los intereses partidarios tienen que quedar fuera del aula”, aseguró Vidal, intentando quebrar con plata la voluntad de los maestros que, dignamente siguen reclamando que sus sueldos aunque sea superen la línea de la pobreza.
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