De la Redacción de Contrapoder –
Alberto Fernández se reunió ayer por la tarde con los principales dirigentes de Ctera. En el encuentro, el candidato del Frente de Todos se comprometió a reabrir la paritaria nacional docente, uno de los principales reclamos de los gremios docentes. Estuvieron Roberto Baradel, Sonia Alesso y Eduardo López, quienes le acercaron un documento con una serie de lineamientos educativos titulado “Proteger lo que crece en las escuelas para nuestro porvenir”.
“Fue una reunión muy positiva. Le acercamos a Alberto un documento programático con lo que creemos deben ser los pilares en los próximos años y él nos aseguró que va a reabrir la paritaria nacional”, explicó López a la salida de la reunión, quien también confirmó la promesa del candidato a reabrir la paritaria nacional “abolida” por Macri.
A principios del año pasado, Mauricio Macri firmó el decreto 52/2018, a través del cual derogó la mesa de negociación salarial a nivel nacional. El argumento que dieron, por entonces, es que el Estado nacional no tiene la potestad de acordar salarios cuando las escuelas están en la órbita de las provincias. Al mismo tiempo refrendaron el piso de un 20% por encima del salario mínimo vital y móvil para empezar a negociar en las jurisdicciones.
Los dirigentes gremiales se opusieron a la medida. Ellos plantean que, sin la instancia de establecer un piso en todo el país, se genera una “enorme” desigualdad entre las provincias de acuerdo a sus distintas realidades económicas.
Cerca de Alberto Fernández, no se aventuran a dar demasiadas precisiones sobre un eventual programa educativo.
Sin embargo, ante la consulta de este medio, los referentes en la materia del Frente de Todos consideran que el Estado nacional se desentendió de la gestión educativa en los últimos cuatro años y coinciden en la necesidad de recuperar la paritaria nacional. Por lo cual, ante una eventual victoria en octubre, se espera un gobierno más cercano a los gremios.
El documento que le presentaron los representantes de los docentes al candidato presidencial comienza con esta frase: “El proyecto debe partir de un objetivo principal e ineludible que consiste en saldar la deuda educativa con la sociedad. Esto se logra cumpliendo con las leyes educativas vigentes que hoy regulan el derecho a la educación, y generando los acuerdos democráticos necesarios para ampliar cada vez más los derechos sociales de toda la población, bajo los principios fundamentales de la justicia y la solidaridad”.
Del mismo modo, continúa con diez puntos:
-Un proyecto educativo a escala nacional, con saberes y contenidos para la soberanía pedagógica.
-Escuelas seguras, donde los niños y adultos sientan deseos de concurrir y posibilidades reales de asistencia a los establecimientos.
-Vacantes suficientes en escuelas públicas disponibles en todo el país y todos los niveles del sistema.
-Ampliación de los horarios escolares y una organización institucional que favorezca la articulación familia-escuela.
-Docentes reconocidos en su trabajo y profesionalidad, con salarios dignos, y con recursos materiales y tecnológicos para la tarea de enseñar.
-Cargos docentes suficientes y jornadas institucionales para democratizar la educación.
-Formación permanente gratuita y de calidad para los docentes de todo el sistema.
-Sistemas de evaluación que contribuyan con el mejoramiento de la enseñanza y no se reduzcan a una simple medición de control.
-Universalización de la educación desde los 45 días hasta el nivel superior.
-Una educación común para todos, que a su vez aloje las diferencias y necesidades propias de las diversas modalidades y contextos.
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