De la Redacción de Contrapoder –
El juez del Supremo Tribunal Federal brasileño, Marco Aurelio Mello, ordenó hoy, a través de una medida cautelar, la inmediata libertad del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva, preso en Curitiba desde el 7 de abril, medida a través de la cual, el juez Sergio Moro, próximo a asumir como ministro de Justicia del fascista Jair Bolsonaro, logró proscribir al ex presidente de las últimas elecciones “marcando” así el resultado que conocemos.
Poco después de divulgada la decisión judicial en Brasilia la presidenta del Partido de los Trabajadores, Gleisi Hoffrmann, tuiteó “acabamos de solicitar la libertad de Lula”, y luego agregó que “El ministro marco Aurelio tenía poder, convicción y legitimidad para decidir. Así lo hizo. Hace un año defiende esa posición, basada en el entendimiento de la mayoría del supremo. Nadie lo cuestiona. decisión para ser cumplida”, tuiteó Gleisi, recordando que ya antes de las elecciones Mello ya había ordenado la liberación del entonces candidato a presidente, medida que mediante una argucia judicial. Moro logró evitar.
Acabamos de peticionar a solicitação do alvará de soltura para Lula. Abrimos mão do exame de corpo de delito #LulaLivre HOJE
— Gleisi Lula Hoffmann (@gleisi) 19 de diciembre de 2018
Ministro Marco Aurélio tinha poder, convicção e legitimidade para decidir. Assim o fez. Ha um ano defende essa posição, baseada no entendimento da maioria do Supremo. Ninguém o questiona. Decisão para ser cumprida#LulaLivreJá
— Gleisi Lula Hoffmann (@gleisi) 19 de diciembre de 2018
El juez Mello ordenó también la libertad de todos los detenidos contra quien haya una condena en segunda instancia, como es el caso de Lula. La ejecución de la orden del Supremo quedó en manos de la jueza de primera instancia Carolina Lebbos, conocida por su alineamiento con el ex juez Sergio Moro.
La noticia causó un sacudón político en Brasilia, donde Bolsonaro encabezaba una reunión con su gabinete en la residencia de campo Granja do Torto, que le fue cedida por el saliente Michel Temer. La procuradora general de la República, Raquel Dodge, tan antilulista como Moro, convocó a una reunión de urgencia para una eventual objeción de la cautelar del juez Mello. Lula debería ser puesto en libertad al final de la tarde.
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